Miedo 1:
¿Qué es el miedo? Podría dar una explicación científica a tal sensación pero eso no le convencía pues creía fervientemente en lo intangible que rozaba lo inexplicable. ¿Contradictorio? Demasiado, pero se había acostumbrado a ello, al estar siempre cuestionándose y debatiendo todo a su alrededor, sí, se hundía innecesariamente en pensamientos que no lo llevaban a ningún lado pero que al menos lo mantenían ocupado y así dejaba en un segundo plano lo que tanto le estaba oprimiendo su gargánta extendiéndose hasta su corazón que lo hacía latir tan deprisa producto de adrenalina y de temor. Contaba con un miedo causado de tiempo atrás, un miedo que tomaba forma en el fracaso pues él siempre había sido de los que ganaban en todo sin mayor esfuerzo, sin embargo, ahora era diferente, todo había cambiado y tenía que luchar para lograr el éxito que tanto anhelaba. ¿Y si estaba dejando a un lado los placeres de la vida por esa obsesión se sobresalir y siempre triunfar? ¿Y si realmente no era esto lo que necesitaba? Pero sabía que el preguntarse tan constantemente aquellas cosas le estaba impidiendo observar con cautela lo que verdaderamente valía la pena pero aún así, no podía quitar esas dudas de su cabeza. Bah, tenía la habilidad de transformar lo más simple en algo tan complicado. No más, ya no más.
¿Qué es el miedo? Podría dar una explicación científica a tal sensación pero eso no le convencía pues creía fervientemente en lo intangible que rozaba lo inexplicable. ¿Contradictorio? Demasiado, pero se había acostumbrado a ello, al estar siempre cuestionándose y debatiendo todo a su alrededor, sí, se hundía innecesariamente en pensamientos que no lo llevaban a ningún lado pero que al menos lo mantenían ocupado y así dejaba en un segundo plano lo que tanto le estaba oprimiendo su gargánta extendiéndose hasta su corazón que lo hacía latir tan deprisa producto de adrenalina y de temor. Contaba con un miedo causado de tiempo atrás, un miedo que tomaba forma en el fracaso pues él siempre había sido de los que ganaban en todo sin mayor esfuerzo, sin embargo, ahora era diferente, todo había cambiado y tenía que luchar para lograr el éxito que tanto anhelaba. ¿Y si estaba dejando a un lado los placeres de la vida por esa obsesión se sobresalir y siempre triunfar? ¿Y si realmente no era esto lo que necesitaba? Pero sabía que el preguntarse tan constantemente aquellas cosas le estaba impidiendo observar con cautela lo que verdaderamente valía la pena pero aún así, no podía quitar esas dudas de su cabeza. Bah, tenía la habilidad de transformar lo más simple en algo tan complicado. No más, ya no más.
Miedo 1.1:
Vivía con el miedo a
la soledad pero a la vez, vivía con el miedo a estar condenado a depender de
una felicidad compartida con alguien pues no necesitaba estar atado a la
presencia de un ser llamado "alma gemela" para sentirme completo y
encontrar la vivacidad que había perdido en el camino. ¿Vivía? No, no le
hubiese llamado así y me corrijo, sobrevivía a este sinfín de temores que se
imponían en lo profundo de mi ser. Detestaba ser tan sensible pero también tan
racional, después de todo hacía lo posible para
convencerse de que nada era real, todo era un juego de la química, el sistema
límbico y las sinapsis que sucedían en su anatomía. Ah, tan exactas son las
ciencias que sin rodeos te explica las cosas pero ¿qué sucedía con esa parte
emocional que tan efectiva funcionaba en su cuerpo? La misma razón me hacía
dudar sin razón, y era por esa parte tan humanamente sensible que me hacía
creer en la magia aunque en mis adentros solo salga a la superficie el lado
científico que he venido formando como un mismo ser.
Así que, ¿podré vivir y dejar de sobrevivir si me encuentro solamente en ese estado donde la lógica me haga afirmaciones de lo mundano? O ¿podré vivir estando al margen de las sensaciones solamente? Ciertamente se dice tener ambos para formar un equilibro emocional pero cuestionarse todo el tiempo ¿acaso eso es balance? Quién sabe, de lo único que estoy seguro es de ese desorden y caos con el que se lucha constantemente el cual no me deja vivir.
Así que, ¿podré vivir y dejar de sobrevivir si me encuentro solamente en ese estado donde la lógica me haga afirmaciones de lo mundano? O ¿podré vivir estando al margen de las sensaciones solamente? Ciertamente se dice tener ambos para formar un equilibro emocional pero cuestionarse todo el tiempo ¿acaso eso es balance? Quién sabe, de lo único que estoy seguro es de ese desorden y caos con el que se lucha constantemente el cual no me deja vivir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario