miércoles, 16 de abril de 2014

I'll die happy tonight.





¿Por qué de repente comienzo a sentir ese dolor en mi pecho? No es un dolor que se pueda curar con el tiempo, al contrario, es un dolor que  pareciera que cada vez se hace más grande a medida que pasa el tiempo. 
Joder, te amo demasiado y no por capricho, te amo como no no había vuelto a amar. Te amo de una forma inexplicable, de forma escandalosa, de forma placentera. Y sé que no puedo estar contigo y eso me duele pero no lo puedo evitar, me gusta ese dolor dulce que siento por ti. Así es mi amor, masoquista pero dulce pues se que este dolor no durará para siempre más el recuerdo sí lo será. Y aunque dentro de unos años quizá ya no te ame, recordaré lo dulce que fue amarte.


The language of love letters is the same as suicide notes.” 
— Courtney Love 


Un placer más.


Como lo sospechaba, lo observé por tanto tiempo a lo lejos  para poder conocerlo un poco que lo que al principio comenzó como odio hacia él porque trataba de ser como tú y curiosidad por su parecido a mis gustos, terminó siendo el principio de un nuevo amor e incluso de una nueva yo.

Cuando apareció en frente mío aquel día, una extraña sensación invadió mi cuerpo. Traté de acercarme a él desde el principio pues algo en mi interior me empujaba para hacerlo, pero las circunstancias no se dieron y no fui capaz. A decir verdad su belleza era muy impactante, así que siempre estaba rodeado de mujeres, cosa que hacía imposible acercarse a él. Ahí fue cuando decidí observarlo simplemente de lejos.

Al observarlo poco a poco me di cuenta que todo en él me recordaba a mi antiguo amor, a mi primer amor para ser más precisos. Por un lado me dio rabia pues pensé que ya lo había superado y por otro me sentí aliviada de volverlo a ver.
Los días pasaron y yo seguía detallandolo de lejos, por lo que pude conocer un tanto su personalidad y para mi sorpresa resultó ser un engreído y un desgraciado o al menos eso era lo que aparentaba. Supongo que él percibió mi mala vibra sobre él puesto que cada que nuestras miradas se cruzaban, me hacía mala cara o cuando tenía la oportunidad de hablar con él, me ignoraba. Así fue todo por unos meses, pero a pesar de que no me agradaba yo seguía sintiendo esa sensación en mi cuerpo y seguía viendo en él mi antiguo amor.

Pero un día, para ser más exactos el día de mi cumpleaños me di cuenta que él también cumplía ese mismo día. Por un momento cuando ambos lo supimos nos sorprendimos y decidimos olvidar nuestras malas actitudes con el otro. Ese día, me dio un abrazo que para mi fue eterno y nos felicitamos. Estuvimos alegres todo el tiempo. Eso fue lo que hizo que a partir de ahí nuestra relación cambiara ya que decidimos darnos una segunda oportunidad para poder conocernos mejor.
Solo puedo decir que uno no puede juzgar a las personas sin antes conocerlas, pues nos dimos cuenta que ambos teníamos tanto en común que llegamos a convertirnos en grandes amigos.

Y debo decir que desde que esa amistad floreció, yo cambié y pude mostrar realmente mi verdadero ser. Pude ser yo sin temor a eso. Ah, no pude ser más feliz a partir de ese nuevo cambio en mi vida.
Pero como suele pasar en esas amistades, siempre una persona termina enamorándose del otro sin corresponder. Así me pasó, me enamoré perdidamente de él, no lo supe al instante pero desde que dejé de ver en él a mi antiguo amor y simplemente lo veía a él con su personalidad tan agradable, realicé que ya me había enamorado perdidamente. ¿Qué podía hacer respecto a eso? nada porque él ya tenía a su novia y tampoco quería echar a perder la amistad que tanto costó en formarla.

Y así, solo me quedó seguir observándolo pero ya no de lejos sino de cerca, cosa que era más peligrosa aún pero no me podía negar ese placer de contemplarle y mirarle.